El mejor aliado del posicionamiento de Correa en redes: la oposición
Cuando vivía en Guatemala, varias veces me hicieron la misma pregunta: ¿por qué los ecuatorianos son tan monotemáticos? Ante mi desconcierto frente al planteamiento, la explicación fue siempre la misma: odian o aman a Correa, pero todo gravita alrededor de él. Sabia observación.
El paro nacional de junio 2022 fue la muestra patente del fenómeno. Que si Correa financia, que si Correa da las órdenes, que si Correa dice, hace, pone o quita. Fanáticos, todos, a favor y en contra.
Agradezco infinitamente por el oxígeno que fueron, para mí, esos 5 años en Guatemala, porque me enseñaron a negarme a caer en la trampa de esta dualidad reduccionista: amar u odiar a Correa.
Correa sigue siendo el centro del relato
Días después del fin del paro, el ex presidente Rafael Correa fue invitado a dictar una charla en una renombrada universidad francesa, lo que generó un airado reclamo de funcionarios diplomáticos ecuatorianos. Otro déjà vu y #CorreaEnLaSorbona se volvió tendencia en Ecuador con más de 10.000 tuits.
Casi simultáneamente, como para no perder la costumbre de referirnos al personaje, el presidente Guillermo Lasso ofrece una entrevista a un medio internacional y afirma que "el ex presidente sentenciado por corrupción, que vive prófugo en Bélgica, busca alterar el orden público".
La alusión no quedó ahí, sino que estableció explícitamente un triángulo peligroso: Correa + indígenas + narcotráfico. De nuevo, ¿quién es el epicentro? El señor Correa.
Preguntas serias: ¿alguien le habrá dicho al presidente Lasso que no se entiende, entonces, que promueva el diálogo con un grupo que él mismo califica de terroristas, financiados por el narco, dirigidos desde Bélgica? ¿Alguien le habrá alertado al Presidente Lasso de que, mientras esto pasa en Ecuador, el señor Correa se estará frotando las manos viendo cómo suben sus menciones en redes sociales? No todas son positivas, claro, pero de que el hombre está vigente, está vigente.
Lo que estamos viviendo me recuerda la anécdota de una querida amiga, que participó en el equipo de producción de la paradigmática serie de Caracol Internacional Pablo Escobar, patrón del mal. La idea original fue recordar al pueblo colombiano lo oscuro del personaje para cortar de raíz todo culto. Resultado: la sobre exposición lo convirtió en un antihéroe, que generó más adhesiones que disidencias y hasta derivó en posicionar un estilo de vida aspiracional.
Guardando las distancias, si esta recurrente referencialidad al señor Correa se mantiene, me atrevo a proyectar un desenlace similar. Señores de la oposición, ¿realmente están logrando su propósito de exterminio político y reputacional a Correa o lo están convirtiendo en el influencer ominipresente de las redes en Ecuador?¡Piénsenlo!
PD. ¿Cuál es mi relación con el señor Correa? Personalmente, ninguna. Académicamente, su cuenta Twitter ha sido mi objeto de estudio desde mi tesis doctoral. Políticamente, coincidimos en los para qué y discrepamos en los cómos.
